La salud humana no depende únicamente de lo que ocurre en el interior del organismo
Y cuando nadie lo esperaba, llegó el coronavirus.
El coronavirus no ha sido un accidente; es uno más en una larga lista de patógenos provocados por actividades humanas
Si destruyen bosques y ríos, agotan recursos naturales y ponen en contacto especies que nunca se hubieran encontrado, es solo cuestión de tiempo que aparezcan enfermedades que nunca hubieran aparecido.
El coronavirus no ha sido un accidente. Solo es el último invitado que se suma al gran festín de los patógenos favorecidos por la humanidad, un festín que está lejos de haber terminado.
Con todo ello se conseguirá reducir más la mortalidad.Pero nada de todo esto garantizará un mayor bienestar si no se acompaña de acciones para armonizar la relación de la humanidad con la biosfera.